miércoles, 29 de junio de 2011

Tenemos derecho

Que la caverna mediática salte a degüello con el asunto de la capitalidad para Donosti entra en el guión. Al fin y al cabo, el monotema vasquito sigue siendo el recurso más eficaz para que suene la caja registradora, que es en lo que consiste esta miserable profesión de vender periódicos, ganar televidentes o sumar oyentes. Y ahí vale todo, fundamentalmente esa máxima periodística de no permitir que la realidad te pueda estropear un buen reportaje o una brillante argumentación. En la tarde del martes, en la redacción nos tomábamos a coña el desbarre institucionalizado de los medios habituales, esos que tendrán que reducir paginación y plantilla cuando los de las capuchas echen la persiana. Hubo hasta una medio porra para elegir el titular y nos salió el de Europa Ta Askatasuna. No hay mejor arma contra la aberración que el humor. Pero todo eso entraba en la lógica de quien ha hecho del antiterrorismo su modus vivendi. Lo que es más descorazonador son reacciones de gentes como Rosa Aguilar o Juan Alberto Belloch, que ayer insistía en que se revisara la decisión del jurado. Entiendo el humano enfado del que pierde y ve como el trabajo realizado durante años se va al garete en diez segundos. Sus ciudades, Córdoba y Zaragoza, seguirán siendo lugares que hay que visitar obligatoriamente independientemente del asunto del 2016. Lo que no puedo entender es que se sumen a la caverna del odio negándonos el derecho que tenemos a ver a un alcalde de Bildu poniendo la mano en el hombro a un exalcalde socialista por un objetivo común. Para ellos será una chorrada. Para nosotros, ninguna.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 30 de junio de 2011

miércoles, 22 de junio de 2011

Perdonavidas

Lo único importante en toda esta jodida pesadilla de los últimos 50 años es que la muchachada de las capuchas lleva 692 días sin cometer atentados, lo verdaderamente fundamental. Supongo que será cuestión de tiempo –de mucho tiempo– que se vayan cerrando heridas, que aprendamos al menos a convivir visto que la reconciliación será casi imposible. Demasiada sangre, demasiado muerto, demasiada violencia y demasiados odios entre unos y otros. Lo que tengo mis serias dudas de que tenga arreglo son la chulería, la prepotencia, la arrogancia, la actitud de chuloputa barriobajero sin arreglo de personajes como Txeroki, apodo que es un insulto a la noble tribu nativa americana. Las imágenes de ayer en la Audiencia Nacional agachándose hasta cuatro veces por debajo del cristal blindado para mirar a los testigos protegidos lo dicen todo. Macarrismo en estado puro, de ese que se lleva en el ADN, de ese que revela a la perfección que este tipo jamás ha mantenido conversación alguna con un diferente. Esta misma semana se conocían unas declaraciones suyas en donde el emperador encargado de bajar el pulgar durante varios años al frente de ETA aseguraba que ya había pasado la etapa de la violencia y que igual había que estar otros 50 años sin atentar. Lo que no decía es si se va a encargar él de iniciarla otra vez dentro de cinco décadas. Una de las frases más brillantes que he oído nunca sobre este tema es cuando Josu Jon Imaz dijo aquello de que él no tiene nada que negociar sobre el futuro de su país con unos señores con capuchas. El de ayer de las risitas era uno de los capucheros.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 23 de junio de 2011

miércoles, 15 de junio de 2011

Madrid, octavo herrialde

Visitar Madrid siempre es un placer. Políticas aparte, es la única ciudad en donde nadie te pregunta de donde eres y sigue teniendo ese aire canalla de tugurios infectos en los que sabes de antemano que algo va a pasar, malo o bueno pero algo pasará. Y a pesar de los mil intentos de todos los alcaldes, conducir por Madrid cuando te sales de la Castellana es toda una caja de sorpresas, un puto caos vamos, no como en Barcelona, que pillas un semáforo en verde al principio de la Diagonal y acabas sin ningún sobresalto saludando a Colón, que parece que el orden de los semáforos también son obra de Pep Guardiola, el hombre del SabadellGuipuzcoano, el que dentro de poco nos convencerá que en realidad no somos nosotros los que metemos el dinero en el banco, sino que es el banco el que mete el dinero por nosotros. Que me voy del tema. El caso es que Madrid es cojonudo pero todo tiene su vuelta. Ayer estuve haciendo zapping por una serie de cadenas que no hubieran durado un minuto en Nuremberg y me quedé en TeleMadrid, más conocida por TeleEspe, pero entre todo lo que ví, eso parecía lo más socialdemócrata al alcance de mi mando. Craso error. Hora y media de reloj y ni palabra de Móstoles ni de la M-40, ni siquiera de Mourinho, el hombre que prefiere que sus ahorros no estén en el SabadellGuipuzcoano, por si acaso. Uno huye de la vorágine Bildu, de los pactos y repactos y me tengo que tragar 90 minutos de monotema vasquito, en donde el más rojo de todos defendía que los del PNV son solo un poco de la ETA. No se que me da a mí que a algunos bastantes esto de que acabe la ETA no les convence demasiado.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 16 de junio de 2011

jueves, 9 de junio de 2011

Bildu

Poca legitimidad para hablar de gobiernos serios pueden tener quienes presentan como candidato a alcalde de Donostia a alguien que ni siquiera ha sido elegido por los ciudadanos o quien recoge su credencial de juntero y habla de pactos de futuro mientras sabe que ya ha sido colocado pertinentemente y a buen recaudo en esa enorme finca ubicada en Lakua. Podrá gustar más o menos lo que propugna o deja de propugnar Bildu, pero ha llegado la hora de la política con mayúsculas, también para Bildu, que si quiere gobernar tendrá que abandonar el facilón recurso del quebiensevivecontratodo y meterse de lleno en el barro, en el fango de la gestión, ese que conlleva que te puedan poner a parir en la calle por las adjudicaciones de unas viviendas de protección oficial y no por el consabido monotema que nos ha secuestrado a todos en los últimos 30 años. Elecciones, partidos, votos, propuestas, palabras y la pesadilla de los capucheros cada día más alejada. ¿No era eso lo que llevamos treinta años reclamando? Pero aquí da la sensación de que el vacío de la inactividad de ETA está cogiendo a más de uno con el paso cambiado. Es lo que tiene haber estado más de treinta años sin política de verdad, sobreviviendo con cartas marcadas hasta la náusea a lo que nos obligaban los que un buen día decidieron echarse al monte para salvar a la patria y acabaron jodiendo el monte y la patria. Que gobierne Bildu donde tenga que gobernar, sin miedos, sin complejos, sin juicios previos. La única pena desde el día 22 de mayo es que ETA ha dejado pasar 18 días magníficos para anunciar el cierre por derribo del chiringuito.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 9 de junio de 2011