miércoles, 23 de marzo de 2011

Varas de medir

Gracias al muerto de ayer en el atentado de Jerusalén, el personal se ha podido enterar de que el día anterior habían muerto ocho palestinos en Gaza. Lo de Gaza ya había salido anteayer, pero los periodistas la habíamos relegado a esos lugares de los periódicos reservados para lo que ya no llama la atención, o los propios medios decidimos que ya no llama la atención. El atentado de Jerusalén abría ayer los digitales y hoy será motivo de comentario en las portadas. La misma lluvia, la misma miseria. Diferente varas de medir para los mismos dramas. En Jerusalén, en Israel, en Palestina, en Judea y Samaria no habrá jamás una solución justa hasta que todas las vidas, todos los seres sean tratados de igual a igual, sean judíos, musulmanes o cristianos. La única política que se conoce ya derrotada es la de la imposición y eso es algo que deberían tener muy presente judíos y palestinos. No hay victoria posible a través de la violencia, sea esta del signo que sea y sea cuál sea el brazo ejecutor que la perpetre. Hace un año y medio tuve el privilegio de pasear por las calles de Jerusalén de la mano de un amigo periodista judío. Judío por convicción, por orgullo, por persecución de siglos y siglos, me mostró orgulloso logros de una sociedad ejemplar. Periodista judío que trabajaba con periodistas palestinos de las zonas ocupadas. El lo tenía muy, muy claro. “Lo más importante de todo–me decía–es acabar con esa permanente humillación a la que sometemos a los palestinos. Nunca se acabará esto si nos los tratamos de igual a igual”. Los periodistas también deberíamos aprender de esto.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 24 de marzo de 2011

miércoles, 16 de marzo de 2011

Los 50 de Fukushima

Nuevo incendio en el reactor 4 mientras fracasa el plan para tirar agua desde helicópteros, una nube de vapor sale del 3, el 2 emite radiaciones y los datos del 70% y el 33% de las varas de combustible en los reactores 1 y 2 hacen temer su fusión. No tengo ni idea de energía nuclear pero, ojalá me equivoque, esto tiene toda la pinta de que va la central de Fukushima va a reventar en mil pedazos. Ya ha hablado hasta Aki Hito y si este sale a hablar –que es como nuestro Borbón pero en emperador, que a efectos fiscales viene a ser lo mismo–, es que el panorama pinta algo más oscuro que el negro. Y en medio de toda esta película, lo que impresiona por lo que supone la decisión, son los 50 hombres y mujeres que a base de agua de mar están tratando de evitar el desaguisado que tiene acojonado a medio mundo. No se si relacionado con el proverbial sentido del sacrificio nipón, o simplemente que en los momentos más complicados es cuando surgen los principios humanos más valiosos, es encomiable la determinación de esos 50 seres humanos que saben perfectamente que igual son sus últimas horas bajo la faz de la Tierra pero que merece la pena el esfuerzo para tratar de salvar decenas de miles de vidas. Espero que nos lo puedan contar más adelante, en ese momento en que nos tendremos que parar a plantearnos si el ritmo de vida absurdo al que hemos llegado tiene algún sentido para justificar la propia existencia de las centrales nucleares. Pero mucho me temo que en esto, como en muchos otros asuntos, nuestros lujos de hoy en día acabarán siendo las necesidades de nuestros hijos. Así nos va.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 17 de marzo de 2011

miércoles, 9 de marzo de 2011

Las monjitas de Cantona

Iba ayer tranquilamente conduciendo al curro a 110 y sin fumar, de un cívico que daba grima, cuando me encontré por la radio la noticia no del día, ni de la semana, ni siquiera la del mes, que va. La noticia del año sin ningún lugar a duda en los 70 aburridos días que llevamos de 2011. Supongo que todo Dios, y nunca mejor dicho, está al corriente de que las dulces monjitas del convento zaragozano de Santa Lucía tenían millón y medio de euros en bolsas de plástico y en billetes de a 500. Ya están los ateos, rojos y anticlericales poniendo el grito en el cielo, como siempre. Si Ana Urchueguía recaudó 900.000 dólares vendiendo bolsos en Lasarte, ¿Porqué no van a poder las monjitas, que son muchas más y mejor organizadas, sacar millón y medio con los dulces y los cuadros de sor Van Gogh? Ya estamos viendo fantasmas donde no los hay. Yo les voy a contar la realidad. Con sor Van Gogh y la venta de dulces se saca un millón y medio de euros con la patilla. Ellas seguro que lo llevaron al banco, como Dios manda, pero en un ataque de rojerío sin precedentes, hartas de esta sociedad de consumo materialista que nos invade, en realidad fueron las únicas que siguieron el llamamiento de Eric Cantona y fueron hace unos meses a sacar la pasta al banco en plan hooligan. Esa es la realidad y lo demás son patrañas de los periodistas que buscan carnaza donde no la hay. Puros chismorreos. En tiempos de crisis, Urchueguías vendiendo bolsos y pendientes y monjitas pintando y vendiendo dulces no es que sean necesarias, es que son imprescindibles. Cantona, la revolución siempre empieza donde menos te lo esperas.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Actualidad

Como llevo un montón de días enfrascado en un culebrón centroamericano, de esos que rasean por lo bajo, con dineros publicoprivados, reses marcadas a fuego en haciendas con capataz, matoncillos de gatillo fácil y virreinas de siglos felizmente olvidados, estoy un poco al margen de la actualidad. Es lo que nos suele pasar a los periodistas, que nos metemos en nuestras cosas y tiene que ser la carnicera la que nos cuente qué pasa por el mundo, que no se yo qué tienen las carniceras que se enteran de las cosas antes de que pasen, como el del Faisan. Pero a pesar de todo, en una alarde de capacidad, me acabó de enterar de que el muy noble y leal Gobierno del Reino de España –de eso si que me he enterado, de que el Borbón sigue en el trono y los republicanos llevamos perdiendo 72 años– ha decidido prohibir circular a más de 110 kilómetros por hora para ahorrar en gasolina, que por lo visto se ha puesto por las nubes por culpa de los impacientes chavales árabes que les ha dado ahora, precisamente ahora en mitad de la jodida crisis, por pedir libertad. Ya se que no me van a nominar para presidente del FMI, incluso lo más probable es que tampoco me llamen nunca para asesorar a Gipukoa Aurrera, Aurrera¡, pero digo yo, ¿no sería lo más lógico para que ahorremos en gasolina que nos bajen el precio de la gasolina? Ya se que el plan puede parecer simple, sencillo incluso, pero como diría Walter Sobchak en El gran Lebowski, es precisamente en su sencillez donde radica su belleza.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 3 de marzo de 2011