lunes, 14 de septiembre de 2009

Anguita, vuelve

Bueno, ya está. Parió la abuela. ZP ya nos ha confirmado levemente, lo peor está por venir, cómo vamos a pagar la factura de fútbol en palco, cena de marisco y puticlub con la que convidamos entre todos a los banqueros, esa pobre gente a la que no le llega la camisa al culo. De alguna manera había que pagar la hosca y ZP ha tirado por el modelo socialista del siglo XXI. Es decir, a escote entre los que menos tienen, si es que tienen algo. Socialismo de altura. A saber; subimos la gasofa para el personal que tiene la mala costumbre de usar el coche (además, de paso nos marcamos el mocazo de que somos verdes y guays y matamos dos pájaros de un tiro), a los del jodido fumeque, a los de la cañita o el vinazo en el bar los acribillamos, y subimos el IVA para el consumo, que la gente es de un consumista que tira pá atrás. Subimos artículos de lujo como el papel higiénico, los tampones o las cintas para matar mosquitos y cuadramos la juerga que se corrieron los de la cuadrilla del mal en Simcavs, fondos opacos en Groenlandia e inversiones en proyectos tan solventes como la obtención de trufa fresca en el Alto Volta. Y a la izquierda de ZP, un páramo. Lo que daría por haber escuchado a Anguita en estos tiempos que corren de los que, por otro lado, ya hablaba el Califa quince años atrás. Pero como el grupo mediático de cabecera del socialismo del siglo XXI, el que lleva años acribillando a Chávez porque no le van bien los negocios por la zona, decidió que era un peligroso mesiánico, no se hable más. Que siga la juerga y a esperar a que a la cuadrilla le apetezca otra de fumbo, marisco y puticlub, que les apetecerá.

jueves, 27 de agosto de 2009

'Ted' Kennedy

Con la muerte de Ted Kennedy acaba una saga que ha marcado en gran manera el devenir político de los Estados Unidos de América. Una saga peculiar de una familia combativa que refleja como pocas la historia del sueño americano. Y reconozco que siempre he sentido simpatía por los Kennedy. Por sus valientes posicionamientos políticos y por saber sobrevivir siempre a los múltiples escándalos en un país que no perdona los desvaríos en los asuntos de la moral. Es curioso, en Estados Unidos si algún político con pretensiones tiene un tropiezo moral o un exceso adictivo es enviado sin juicio ni defensa al fondo del pozo. Cualquier político, salvo los Kennedy, que han tenido en las faldas, el alcohol y las drogas su Biblia particular desde tiempos inmemoriales. Bostonianos convictos y confesos, irlandeses de origen y católicos profesos han sabido mantener siempre el espíritu rebelde e inconformista de la elitista Nueva Inglaterra. Desde que John Fitzgerald accediera al despacho oval de la Casa Blanca, los Kennedy siempre han sido una de las voces más limpias y claras de aquel país, al margen de coyunturas concretas. Ted era un claro ejemplo de ello. Ubicado en el ala izquierda del Partido Demócrata y con 45 años ganando su escaño en el Senado (que un Kennedy gane un escaño en el Senado por Boston es algo así como que Ana Urchueguia gane en Lasarte; un mero trámite) siempre ha predicado contra viento, marea, intereses y multinacionales para conseguir una sanidad pública para todos. El mejor homenaje que le podría hacer Obama es conseguirlo.

lunes, 24 de agosto de 2009

Úlcera

Tres años con Plutón fuera del Sistema Solar y acabo de descubrir donde se aloja Patxi López desde que hace 100 días fuese investido lehendakari. Pero no un lehendakari cualquiera no, sino el primer lehendakari con mayúsculas, como repite hasta la saciedad la prensa capitalina, y la local del grupo capitalino, con una unidad de criterio y argumentos rayando en lo chabacano y en el que sólo coinciden para glosar alguna hazaña de La Roja. A los periodistas nos resulta divertido ver como medios de comunicación que se apuñalan a diario, con técnicas propias de Primera Plana de Billy Wilder, al escuchar la sola mención de la joven promesa de Portu sustituyen los navajazos en el cuello por los piquitos en el morro. Enternecedor. Ayer, en esa multientrevista mundial, el periódico más anti-PSOE que ha parido la piel de toro le daba un épico titular de "Le hemos dado la vuelta a la tortilla". ¿A qué tortilla, Patxi? Además, sin ánimo de ofender, yo siempre que le doy la vuelta a la tortilla me sale un lado básicamente igual. Te tiraste varios meses poniendo a parir a Ibarretxe, y con razón, sobre que los vascos necesitábamos menos consultas y más soluciones a los problemas de las cosas de comer. Llevas cien días a las ordenes de los portadistas de los periódicos de Madrid retirando carteles que luego vuelven a poner para que los vuelvas a quitar antes de que los vuelvan a poner. Aquí hay un paro que no para de crecer, una vivienda por las nubes, unos arrantzales que no pescan, unos baserritarras a los que les chulean los precios y mil historias más a las que hay que meter mano y sólo se te ocurre pactar con la derecha. Me queda el consuelo de las úlceras que estás generando a las gentes de izquierda de las Casas del Pueblo. Triste consuelo.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Óscar Pérez

Reconozco que no sé nunca cómo afrontar las tragedias en la montaña. Me superan por completo. Desfilar en plena adolescencia tras los ataúdes de dos amigos fallecidos mientras hacían alpinismo o llegar a portar esos mismo ataúdes en el caso de otros dos en la misma época fallecidos en un alud supongo que acaba por marcar. La agonía radiada de Atxo Apellaniz en el K-2, mientras Juanjo San Sebastián se dejaba ocho dedos en el intento de arrastrarlo como fuera, destapó toda la épica del deporte con mayúsculas. Aquel que poco tiene que ver con el reconocimiento ajeno y mucho con la búsqueda de la libertad en su plenitud absoluta. El año pasado me volvió a tocar de cerca cuando Iñaki Ochoa de Olza se quedaba para siempre en el Annapurna. Esta vez ha sido Óscar Pérez el que descansa en una repisa del Karakorum después de la sabia decisión de gentes que soñaron con lo que ya sabían de antemano que era imposible. Su colega de cordada, Alvaro Novellón, hizo lo imposible bajando a puro huevo hasta el base para buscar un helicóptero de los que no existen, de esos que suben hasta 6.300 metros. Óscar, que nació entre las cumbres del Valle de Tena, seguro que ha sabido en todo momento lo que le esperaba. Y eso es lo que no sé cómo se puede afrontar. El recurso fácil de las gentes es decir que mueren haciendo lo que les gusta. No es así. Es gente que desea con toda su alma no morir. Son pura vida. Aquellos que se atreven a vivir de la manera que los demás predicamos pero no nos atrevemos. Óscar, como se solía despedir Ochoa de Olza, salud y cielo azul.

jueves, 25 de junio de 2009

Lehendakari, un favor

Cincuenta y ocho días, con sus correspondientes 1.392 horas, es lo que dura la pesadilla de un joven estudiante de la UPV, nacido en Camerún, desde que una buena mañana de finales de abril fuera conducido a una comisaría, ante la vergüenza indisimulada de algunos de los policías que lo único que hace es honrarles, y enviado en un avión a su país natal en el que, precisamente, en estos momentos no le viene muy bien estar porque tenía exámenes en el campus donostiarra en donde trata de labrarse el futuro que le negaron en la puteada África. Sus colegas de clase, las gentes de la Uni y un grupo de religiosos en Camerún son los únicos que mantienen a flote la tabla de salvación. Pero quizás, a los que nos gustaría que hubiera aprobado o suspendido como todo Dios en la UPV después de haber hecho los exámenes, no hayamos reparado en un hecho vital que puede cambiar el rumbo no ya sólo de este caso en cuestión, sino de la propia marcha de la humanidad. Por si ustedes no se habían percatado de ello, tenemos un lehendakari no nacionalista, rabiosamente no nacionalista, el más no nacionalista de todos los no nacionalistas del planeta, como ya habrán tenido ocasión de escuchar unas cien mil veces en los últimos días a través de los cientos de altavoces no nacionalistas a su servicio que, hoy por hoy, son prácticamente todos (ya te joderán los fachas en el futuro, Patxi, que esto no dura siempre, ya sabes como son). Pues bien, lehendakari, aquí tienes un caso de libro para demostrar tu presunto no nacionalismo con el agravante a tu favor que, de momento, lo que pidas en Madrid te será concedido cuál si fueses emperador. Un ciudadano vasco (porque entiendo que entiendes que vascos son los que trabajan, estudian y viven aquí) llamado Armand Nong ha sido despojado de derechos básicos por una cuestión de nacionalismo furibundo que, aunque pregones lo contrario, no es el de los discursos sino el que tiene capacidad de legislar. Y no me cuentes la vaina de la burocracia, que una cosa es que sea un poco cabrón y otra muy distinta gilipollas.

jueves, 18 de junio de 2009

Benedetti, Otegi y el maldito opresor búlgaro

Creo que fue Benedetti el que dejó escrito aquello de que cuando nos aprendimos las respuestas nos cambiaron las preguntas. Otegi, y su marciano mundo colateral, se maneja en el raca-raca de las respuestas como pez en el agua, como lo demostró el otro día en su encuentro con el Follonero de Buenafuente (es curioso como ellos exigen permanente trascendencia a todo Dios por lo crudo del conflicto pero el baranda puede irse tranquilamente a hacer el mingafría a la tele). Lo ideal sería que ellos mismos, en un acto supremo de patriotismo, se plantearán cambiarse los esquemas, las prioridades morales, el patriotismo verdadero del construir lo posible frente al patrioterismo chusquero, cuartelero y cañi del símbolo, la pancarta, el uniforme y el grito en la manifa. Pero no parece que, por el momento, los últimos mohicanos de la resistencia vasca estén todavía lo suficientemente maduros para ejercer de patriotas. Habrá que cambiarles las preguntas y dejarnos de ese discurso vacío y programado desde Madrid sobre la consabida condena a la violencia. Habrá que preguntarles, por ejemplo, que nos cuenten con detalle el oscuro curriculum represor del obrero búlgaro al que ayer le jodieron el coche en Arrasate. ¿Y porqué a él? ¿Por trabajar en las obras de ese tren que él no usará pero vosotros si? ¿Por colaborar con las fuerzas represivas de Madrid y de Vitoria? ¿Y dónde esta el límite? ¿Sólo en joderle el coche o podemos llegar a tener un lamentable acontecimiento con algún obrero como el suceso ocurrido en diciembre en Azpeitia que, obviamente, el mundo de Otegi no desea (como no deseaba Bush la muerte de civiles en Irak)? ¿Merece la pena poner en pie un país (pueblo por pueblo, barrio por barrio) reventando el coche de un trabajador búlgaro? No sé, Otegi, se me ocurren unas mil preguntas pero intuyo que tendrías empolladas las mil respuestas. Esto cambiará el día en el que, en vuestro único acto de patriotismo decidáis a cambiaos las preguntas, que hace ya nueve años que cambiamos de siglo, camarada Arnaldo.

jueves, 11 de junio de 2009

Las 'velinas' de Berlusconi y la izquierda

Al final va a acabar por caerme bien. Cada día que pasa la monta más gorda. Yo, si fuera Berlusconi, el lunes, después de volver a arrasar en las urnas, me hubiera ido con 3.000 velinas tipo la Noemi Letizia al Coliseo y hubiera convocado a la prensa, mientras me aguantaba el descojono, para que se hubieran hartado a sacar fotos. Porque a lo del reportaje de El Pais no hay derecho; no se pueden sacar fotos tan borrosas. Dice el fotero que es porque él es un fotero serio, no un paparazzi cualquiera, y que buscaba la denuncia y no la calidad. Vamos a ver, alma cándida, cualquier fotero que se precie (Rober Capa, el que le saca las fotos a los platos combinados y mi sobrino con el móvil) ante esa situación se crece y saca bien a las muchachitas y no borrosas. Y si no sabes, pues no sabes. Y punto y un respeto a las gentes de Interviu. Y es que la izquierda, si es que existe, persevera una y otra vez en el error, además de recibir cada día menos votos porque la peña, que la tiene pequeña pero no es gilipollas, no quiere fotocopias y para dar dinero a los banqueros prefiere elegir a los de siempre en ese negociado, los fachas, que seguro que lo hacen mucho mejor. Por eso, la corrupción jamás va a afectar a la derecha. Jamás, como se ha demostrado en Italia, en Madrid, en Valencia o donde se tercie. Eso al votante de la derecha se la trae al pairo. Sus prioridades morales no suelen ir excesivamente relacionadas con lo de aprovecharse de lo público. Pero lo que clama al cielo es que pretendan desgastar a un presidente italiano de 73 años por un asunto con mujeres de 20. Vamos a ver, señores de la izquierda, estamos hablando de Italia, I-ta-li-a. Eso, en un país bañado por el Mediterráneo, no quita votos, jode, da. Da votos, y muchos. ¿No han estado los de El País nunca en Italia?¿No han visto a los italianos de veraneo por nuestras lindes? Parece mentira que todavía no conozcan el percal. Más de un comunista italiano, y de cien, le habrá votado tras pensar Joder con el Berlusconi, como se lo monta el cabrón. Ya lo decía mi abuelo; Primer artículo, conocer al personal.

jueves, 4 de junio de 2009

¿Qué nos jugamos el domingo? Depende de tu equipo

La gripe porcina, esa enfermedad que según una compañera padecemos todos los hombres por el mero hecho de haber nacido varones, sigue avanzando de forma inexorable ante la apatía y la indiferencia de parroquianos de tabernas y colmados, que sólo tienen palabras y arduos debates para el acontecimiento del siglo; las elecciones europeas del próximo domingo. El simple hecho de que uno de cada tres ciudadanos con derecho a voto acuda a las urnas, debería ser declarado milagrito de la Humanidad, toda vez que sus excelsas señorías se embolsan un módico sueldo de más 7.000 euros (al mes, no vaya a pensar un seiscientoseurista que cobran como él/ella), dietas, viajes, gastos y vicios, que suelen ser abundantes aparte, con lo que el día que sepamos lo que se mete al bolso una euroseñoría vamos a flipar en colorines. El mismo nivel de flipe que sufriremos el día que sepamos, además, que hacen por allá. A pesar de que ya llevan varias décadas y hay acreditados cientos de plumillas y derivados, nadie a ciencia cierta conoce lo que hacen ni, como la gripe porcina que no se puede llamar porcina, que rumbo tomarán en los próximos años aunque, vistos los que van, nos lo podemos imaginar. Y, añado, tengo un trauma. Los de los porros, una de mis opciones más serias de voto para comicios como estos y que en las pasadas anduvieron a un tris de llevar a un eurofumaú a la Cámara de Estrasburgo, esta vez no se presentan. Lo de siempre. Se les pasó el plazo para presentar los papeles que, presumiblemente, previamente se habrían fumado. Así que el panorama es bastante desolador y en este Estado estatal que padecemos, todo es como tirando a bastante aburrido, como bastante previsible, como bastante atado. Los del status quo del PP-PSOE-CIU-PNV se llevaran el 95% de los escaños, con sus correspondientes sueldos, aunque 20 millones de tipos y tipas no colaboren en la farsa. Bastante atado, no. Totalmente atado.

jueves, 30 de abril de 2009

Y resultó que la pandemía era la Bruni

Nunca he sabido muy bien si fue antes el huevo o la gallina, si realmente los culos de Carla Bruni o Doña Letizia en las portadas de los periódicos progres de la piel de toro (porque lo que sacaron fue precisamente eso, los culos) son realmente el interés mayor que tiene en estos momentos el lector medio de prensa y por eso los sacaron los más progres entre los progres o, al contrario, los progres por antonomasia han decidido que a los lectores medios de la prensa nos tengan que interesar por cojones los culos de las dos señoras en cuestión de las que, honestamente, desconozco qué piensan de la vida, de la política, de la situación internacional y de las recetas contra la crisis. Y no tengo ninguna duda que igual tienen unas ideas cojonudas sobre cómo solucionar la crisis, sobre cómo deberían reequilibrarse las relaciones internacionales o sobre cómo frenar el cambio climático. Pero en ese caso, que se vayan ambas dos al registro, se presenten a eso que se llama elecciones, nos lo cuenten, ganen y les escucharemos. Y, obviamente, no les culpo a ellas, aunque también, por colaborar en el paripé. Hay señoras, con mayúsculas, que no se prestan al absurdo por dignidad torera y porque, probablemente, tengan un concepto de lo que debe ser la política mucho más respetuoso con sus conciudadanos que algunas otras. Porque tengo entendido, aunque en esto de las parejas me quedé cuando Julio Iglesias le tiraba los tejos a Isabel Preysler, que el señor Zapatero también está casado pero me da a mí que tiene por esposa a una señora de las de verdad, que ni harta de grifa está dispuesta a exhibirse más de lo que le obliguen por ley. Al final, como siempre, hemos ido a caer a copiar las soplapolleces made in USA porque somos incapaces de igualarles por arriba. Hemos llegado al absurdo radiado, televisado y contado al segundo. Eché en falta que alguno de los tankingthinkings éstos que montan todos estos fregados no les hubiera propuesto a las damas ponerse dos mascarillas. Habrían quedado acorde con la jornada. Es decir, dramática.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 30 de abril de 2009 bajo el pseudónimo de Basilio Lakort

jueves, 23 de abril de 2009

Esperemos que la Lewinski no tenga boletos

Como casi todo lo importante en esta vida torera, lo realmente importante volvió a pasar desapercibido para, nosotros, los periodistas. Y lo realmente trascendente ocurrió hace pocos días cuando la Hilaria Clinton decidió que ponía a su santo esposo, es un decir, en alquiler un día a través de un sorteo entre todos aquellos/as que decidieron contribuir en la campaña de la derrotada Hillary. El premio consiste en pasar un día con Bill, no sabemos para qué ni donde, pero así son las cosas. Esperemos, por el bien de la salud mundial, que a la Lewinsky no se le hubiera ocurrido contribuir en aquella campaña o que, en el caso contrario, haya algún avispilla en la organización del sorteo que se acuerde de quitar su número del bombo. El destino es muy cabrón y traicionero y si saliera la Lewinsky los problemas con las mandíbulas desencajadas de la peña iban a trascender mares y océanos. Y no me meto en lo del sorteo en si mismo, sólo digo que tengan cuidado. Porque claro, si es al bueno de Bill al que se le ocurre sortear a su señora, el pollo que se monta hubiera sido épico. Además, no creo que el bueno de Bill esté para muchas tonterías con estos temas. Y hablando de la Hilaria , es curioso que en toda la movida con los hábiles interrogatorios de la CIA haya tenido que ser Barack Obama el que haya tomado las riendas del asunto, soportando el corporativismo histórico de los torturadores que no se pueden creer como un presidente es capaz de decir públicamente lo que sabe todo Dios en las panaderías y lavanderías. Y digo curioso, porque es precisamente la Hilaria la encargada de todos los asuntos exteriores, que es donde actuó la inteligencia yankee como si el resto del mundo fuera, que es, el cortijo yankee. Reconozco que mi escepticismo con la Clinton es bíblico (más que bíblico, estadístico). Pero creo que el bueno de Obama va a tener un serio problema con esa mujer cuyas líneas en política exterior poco, o muy poco, difieren de las del insustituible Bush. A ese si que le tenían que sortear o, mejor, fichar para que presente el nuevo tiempo en la Euskal. Íbamos a conocer hasta los oleajes de Santa Mónica.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 23 de abril de 2009 bajo el pseudónimo de Basilio Lakort

jueves, 16 de abril de 2009

'Amanece que no es poco' Eguna

Esto del feiusvuk no sé si es bueno, malo o regular, pero cuando menos es curioso. Además de reencontrarte con tu prima Lola, que se fugó a las Canarias con un marinero ucraniano cuando cumplió los 18, recibes todo tipo de sugerencias o invitaciones imprescindibles como asistir a una cata de caracoles en Trujilllo, hacerte de la coordinadora contra la contaminación acústica provocada por los grillos en las verdes praderas de Euskal Herria o sumarte al intento de conseguir un millón de seguidores de el Osasuna de Pamplona (es imposible, no hay un millón de navarros) por el mero hecho de que como los del Barsa lo están intentando, pues ellos, con un par, no van a ser menos, lo que confirma la teoría de que los de Osasuna son en realidad de Bilbao que al poder nacer donde les sale de los cojones, decidieron hacerlo en Navarra. Pero entre toda esa maraña de actividad, que confirma que el paro está haciendo estragos o que los que trabajan con ordenadores son proclives a tocársela olímpicamente, hubo un mail que me hizo volver a la vida. Hacerme fan de Amanece, que no es poco, una película que debería ser de visión obligatoria en guarderías, colegios, universidades, centros de trabajo, residencias para jubilados y tanatorios. Y ahí estamos. 8.000 tipos y tipas como críos con zapatos nuevos plasmando en el muro (en feisvuk hay una cosa que se llama muro donde se puede escribir) las decenas y decenas de frases gloriosas de la única película en donde conozco a varios enfermos que son capaces de recitar de memoria esos 90 minutos del surruralismo , como la definió Cuerda, más genial que jamás se haya llevado a la gran pantalla. Por eso me enteré que hace nada cumplió 20 años. Y hay voces que piden que se celebre en Ayna, pueblo albaceteño donde se rodó, el Día de Amanece, que no es poco , al estilo del Día del Gran Lebowsky que en los yuesei junta a 15.000 fieles una vez al año. Sólo puedo sumarme a la petición, porque todos somos contingentes pero esa pelí es necesaria.

Publicado en Noticias de Gipuzkoa el 16 de abril de 2009 bajo el pseudónimo de Basilio Lakort

jueves, 26 de marzo de 2009

Negociaciones de Gobierno

Vaya por delante que lo primero que haría yo como nuevo lehendakari, Dios os libre, es nombrar a la Paris-Hilton directora de Emakunde. Por lo de la transversalidad, mayormente. Es lo único que tendría claro porque ya me he palmaú con las negociaciones, el nuevo gobierno y rollos así, que diría Brad Pitt en Quemar después de leer . Miento (soy periodista). También nombraría a Regina Otaola consejera de Economía. Pero no de Euskadi, del mundo la nombraba yo. Una mujer que con 27 votos de un censo de 500 se hace con la Alcaldía de Lizartza, reserva espiritual de Occidente, ¿qué no haría con la economía vasca y mundial? Maravillas. Con la Otaola al frente de la pasta , Liechestein a nuestro lado iba a ser un barrio de obrerazos . Del resto, hace tiempo que me he perdido y todavía no ha empezado, pero supongo que los vendedores de coderas se abran puesto las botas para saciar a todos los que pretender pillar cacho, exactamente el mismo cacho que han pillado los otros durante 30 años. Es una de las miserias de la política, pero hay multitud de profesionales con el codo suelto para entrar por cojones donde sea, valgan o no valgan, que eso es lo de menos. Es más, los que no valen, por lo general, suelen ser más diestros en la complicada profesión del pasillismo , que requiere de habilidades extremas y mucho, mucho, mucho estómago. Así que, queridos amiguitos, tenemos por delante dos apasionantes meses, que precederán a otros 14, o 15, o 16, en donde se cuestionará la validez del gobierno y se les pedirá que dimitan, justo inmediatamente antes de que empecemos con la brasa de las próximas elecciones que, por supuesto, volverán a ser las más cruciales de nuestra existencia como pueblo. Una vez celebradas, las próximas, el proceso vuelve a repetirse y así hasta que vuelva el Bing Bang de nuevo y todos descansemos en la paz de Dios. Sea quien sea el nuevo baranda, trae a la Hilton, plis.

jueves, 19 de marzo de 2009

Inmoralidad

Qué una presunta autoridad moral, que lo es para centenares de millones de personas, vaya a un sitio como África para decir que los condones no solucionan el problema del Sida sino que lo agravan es una inmoralidad inadmisible. Afortunadamente, miles y miles de católicos comprometidos de verdad son los que suministran los preservativos a una población diezmada por esa pandemia, una de las muchas. Que en marzo de 2009 sigamos con el raca-raca eclesial sobre el sexo produce sonrojo, cuando no indignación, no por lo que diga Benedicto sino por lo que no hacen, ni dejan hacer.Ya sabemos todos perfectamente que el sistema más infalible del mundo para que no se extienda el Sida es no follar . Lo sabemos todos. No somos gilipollas. Y a todos nos parece estupendo que quienes no lo practiquen por creencias religiosas, no lo haga. Nadie obliga a nadie. Pero como tan cierto es que es la Tierra la que da vueltas alrededor del Sol como que al personal, además de que gane su equipo de fútbol, lo que más le gusta en este valle de lágrimas es tratar de pecar en santa paz, afortunadamente. Y cada cual que lo haga como mejor le parezca, con una única pareja o con cincuenta si hay fuerzas y no se fuma demasiado. Obviar lo evidente es negar que la Tierra gira alrededor del Sol. El problema es que esa negación está afectando, directamente, a la vida de millones de personas en una tierra ya de por sí históricamente puteada . Y quien esto escribe para nada es anticlerical, ni siquiera ateo o agnóstico. Es un creyente que alucina con la manipulación y tergiversación sistemática que una cúpula, casi todas las cúpulas son similares, realiza de algo que nunca nadie dijo en ningún sitio y por arte de birlibirloque pasó a ser dogma de fe como casi todas las mentiras mil veces repetidas. Los centenares de millones de católicos de ley, que son la mayoría, no se merecen a nadie así al frente. Y, además, no es infalible porque echar un polvo , o dos si son pequeños, es bueno para todo. Algo mejor iría el mundo si se practicara con más devoción, aunque sea cristiana.

jueves, 12 de marzo de 2009

Charlatanes de feria

El muy noble y leal Senado del Reino de España tumbó ayer la única posibilidad de que la exhumación de republicanos asesinados durante la Guerra Civil se lleve a efecto de forma efectiva. Esto es; con dotación económica directa del Ejecutivo, haciéndose cargo de todos los gastos. Por ley, como Obama. Pero esto no son los EEUU (tenemos la rara habilidad de copiar todo lo malo de yankylandia y nada de lo mucho bueno que tienen), éste es el país de los charlatanes de feria, de los prestidigitadores, de los trileros de vocación. La pretensión partía de un digno senador balear que decía algo tan evidente, sencillo y elemental como que ya no queda tiempo. Han pasado más de 70 años, los familiares más cercanos empiezan a fallecer y todo lo que no se haga ahora no se podrá hacer. No se puede dejar todo en manos de los entusiastas de turno, entre ellos las gentes de Aranzadi, que hasta la fecha tan sólo han podido sacar a la luz los cuerpos de 4.000 de los 150.000 que se calcula que yacen en las cunetas de la vergüenza. Porque un país que no es capaz de enterrar a sus muertos con la dignidad que merece cualquier ser humano no es un país, es una farsa. Pero lo que indigna, lo que enciende, lo que jode realmente de verdad es que el PSOE haya votado en contra. Que lo haga la derecha estaba descontado. Pero que sea el partido de muchos de los que siguen en las cunetas y que fueron allá precisamente por ese carné, roza el delirio. Estamos en lo de siempre con la jerarquía socialista. Bla, bla, bla, discursos de postal, palabras al viento. Si tan admiradores son de Obama, no le copien las ideas, copien los métodos. La ley. Los familiares de las decenas de miles de constitucionalistas (de la Constitución republicana, pero constitucionalistas) que yacen en cunetas, caminos y veredas cambiarían con los ojos cerrados un magistral silencio del clan de ZP en este tema a cambio que a la hora de la verdad, a la hora de apretar el botón en el escaño que es lo que va a misa, actuasen con la dignidad que se les suponía. Esto, definitivamente, no es un país. Esto es La Noria.

jueves, 5 de marzo de 2009

El clan de los jubilados

Según avanzan de forma inexorable las cifras del paro (del paro tiene la culpa tú alcalde, tú diputado general, tú lehendakari, tú presidente de Gobierno o Trichet, siempre dependiendo del partido del que seas o del que te dé de comer) se masca otra tragedia social, amén del paro en sí mismo. Porque si hay una sociedad paralela única, un sotogoberno perfecto, este no es otro que el que conforman los jubilados, que nada tiene que envidiar a la red tejida por los Bonano, los Genovese, los Bambino, los Corleone o los Luchese . Lo tenían todo organizado y el aumento de ociosos/as por las calles les está poniendo nerviosos y eso, autoridades civiles y militares, es peligroso. Controlaban en su totalidad la obra pública y la lectura de prensa en bibliotecas, que como se te ocurriera tratar de mirar al encofrador de un parking o leerte el ABC (por cierto, se pulen a 250 periodistas del ABC, que se suman a los más de 2.000 que ya han pasado a mejor vida el último año en esta profesión, bastante más denigrada que la de las señoritas que fuman), te estabas jugando la vida. El orden era perfecto. De hecho, en la obra pública hasta dejaban libre el hueco de la valla desde donde no se veía una mierda para que quienes no hemos alcanzado la edad de la jubilación pudieramos ver de refilón al encofrador y alabar la generosidad intrínseca de los capos de más de 65, que siempre tenían los huecos buenos para poder poner a parir a los currelas de turno y, es que, las cosas como son, cada vez se echa menos mortero en los cimientos y así nos va. Pero claro, con lo que no contaba el clan de los jubiletas es que de la noche a la mañana se les hayan unido por las calles miles y miles de desocupaús, que te paseas un martes al mediodía por cualquier plaza pública y aquello parece el malecón de La Habana, pero sin chicas que te digan hola, mi amol , que esto es Euskadi. Ahora hay overbooking y no me gustaría estar en medio de una disputa entre un ex tornero de la CAF y un inmigrante boliviano por la caza y captura del ABC.

jueves, 26 de febrero de 2009

El voto del abuelo

Esto de las campañas electorales viene a ser un poco como la monarquía. Ni Dios sabe para lo que sirve pero nadie lo cuestiona. Pero bueno, tras dos semanas de grandes aportaciones, mañana se acaba el circo para dar paso a la madre de todos los absurdos: la jornada de reflexión. Para reflexionar sobre todo lo que nos han aportado estos 15 días, con minuto y medio iríamos sobrados. Y el domingo, a votar, o no votar, posición tan digna y respetable como la primera. Uno de estos abstencionistas ocasionales o votante peculiar era mi abuelo. Un señor de principios. El abuelo era un tipo al que lo de la lucha partidista digamos que se la pelaba . Probablemente, de forma consciente. Le tocó en la guerra en el bando nacional y fue un soldado ejemplar, heroico, de los de condecorar. Le rozó una bala en la muñeca en la zona de Teruel y se las ingenió para que su novia de entonces, mi abuela con posterioridad, le metiera sal en la herida y estuviera postrado toda la guerra sin pegar un tiro. Su hermano, que fue con él a batallar, se pasó a los rojos , le pillaron y no lo fusilaron de milagro. Tras la guerra, se dedicó al contrabando de fina lencería francesa mientras otros se dedicaban a joder la marrana . Distintas formas de ver la vida. Los principios del abuelo eran muy elementales: tratar de sobrevivir y, además, disfrutando de la vida. Recuperado el hábito de votar, el abuelo, fiel a su filosofía, era un elector no indeciso precisamente, sino volátil. Si votaba a la mañana, votaba a la derecha porque iba a una sociedad de hombres de orden y de ley y esas cosas. A las tardes, se juntaba en sociedad obrera a jugar a las cartas con lo que si se le había olvidado ir a la mañana, a la tarde apoyaba a la izquierda. Había veces que se le olvidada a la mañana y a la tarde. Mi abuelo era de uno de esos sitios primitivos en donde todavía la distinción se hace entre la derecha y la izquierda, no como aquí, que siempre ganan las derechas. De lo que estoy seguro es que, de vivir y poder votar aquí el domingo, iría o no iría, depende, pero no votaría nulo. El abuelo era un vitalista.

jueves, 19 de febrero de 2009

El desfile de la boda de la niña de 'Joshemari', el austero

Yo a la Policía no acabo de entenderla bien. Vamos a ver, en aquellas bodas de Caná que organizó el líder cósmico de Valladolid, el austero castellano como le tildaban su troupe de escribas de cabecera y abultada nómina, para que su niña contrajera católico matrimonio (esas gentes de vivir desarreglado contraen matrimonios y cursan estudios, como los borbones) con el trepa oficial del partido de esos momentos en el régimen berlusconiano que nos tocó sufrir. En aquella boda, insisto, había cientos de policías. Y cientos de policías, misterios del Señor, para proteger a los invitados y no a nosotros de los invitados, que era lo que procedía en aquel suceso. Porque cualquier policía con dos dedos de frente, que no dudo que los haya y muchos, hubiese, al menos, tomado declaración a un 50% de los que protagonizaron aquel desfile del siglo XVI que realizó la flor y nata de la doble moral y triple contabilidad. ¿Por qué? Por el aspecto, así de sencillito. Cualquier investigador, si es que hay alguno, de ingenierías financieras y ese tipo de trabajos a los que se dedican una parte importante de la población para no tener que trabajar, hubiera tomado declaración a los que desfilaban haciendo obsceno alarde del poder que les había otorgado el pequeño duce de Valladolid. Ni Willy Toledo con su Animalario hubiese pensado que el enlace del milenio (enlace, otro palabro que fascina a los piratas en corte) iba a acabar como está acabando. Con la mitad de los comensales declarando en los juzgados por el latrocinio masivo de fondos públicos. Ya sé que quizás no era el día más adecuado, pero de entre todos los que entraban al monasterio de El Escorial a escuchar las siempre esperadas palabras de Rouco Varela (Dios los cría y Garzón los va a acabar juntando), había uno en particular al que yo, una vez más por su aspecto, hubiera retenido al menos un par de horas si hubiera o hubiese sido madero ; al novio. No tengo pruebas, lo reconozco, pero antes me haría socio de El Pocero que jugarme un euro con el encantador hombre de la pequeña Ana.

jueves, 12 de febrero de 2009

15 días de la Marmota

Salvo el tiempo en Donosti, todo es susceptible de empeorar. Si no teníamos poco con el Cristo económico en el que nos han metido los piratillas y con los árbitros que nos mandan a Anoeta el Arminio y el Villar (¿por qué el mandamás de todo esto tiene que ser del Bilbaú ?), esta noche, a las 0.00 horas, como la Cenicienta, comienza una nueva edición del Campeonato Mundial de Vamos a Contar Mentiras Tralalalá que, como todo acontecimiento que se precie, tiene lugar cada cuatro años, mes arriba, mes abajo. Así que ya saben, mantengan a los niños a distancias prudenciales de los aparatos que emiten información y sáquenlos a las calles a que practiquen remo, se pongan como un Dios en los charcos o, simplemente, se unten unos a otros. Como hace cuatro años, como hace ocho, como hace doce..., empezará el vendaval de palabras, promesas, insultos, descalificaciones, manipulaciones, montajes de todo tipo y demás perlas. Las campañas electorales son el circo romano en su estado máximo. Imagino que en una sociedad democrática madura, si es que existe alguna que no lo sé, sobrarían las campañas y los ciudadanos libres analizarían lo hecho en los años anteriores para emitir su voto. Debería ser una obligación de las instituciones remitir a los votantes un listado de las leyes aprobadas en los cuatro años precedentes, con su enunciado y el posicionamiento de todos los partidos. Sería el triunfo de los hechos frente a la charlatanería, pero creo que no irán por ahí. A partir de hoy, asistiremos perplejos a la carrera de maravillas que nos ofrecen todos, sabedores de que la memoria histórica del personal se reduce al partido del pasado domingo. A partir de esta noche, reinará el imperio de la máscara, de la fachada, de la figuración. Pero como todo en esta vida, todo llega y todo pasa y, al final, salvo en Donosti, siempre acaba saliendo el sol. Y además, no sé qué manía tenemos en estos lares por las elecciones si al final, gane quien gane, aquí siempre acaban mandando los mismos. Mi voto para el que me prometa que volveré a ver el sol.

jueves, 5 de febrero de 2009

¡Leyes, Zapatero, leyes!

El otro día apareció Obama por el Despacho Oval, firmó un papelito y en minuto y medio consiguió lo que no habían conseguido muchos, con poder para hacerlo, durante décadas. En concreto, legisló sobre que una mujer que realiza el mismo trabajo que un hombre no puede cobrar menos. Ayer, limitó el sueldo de los directivos de aquellas empresas que reciben ayudas públicas. Por ley, Zapatero, por ley. Y digo esto por la fantástica reunión del talentoso leonés con los banqueros, para que estos últimos den créditos a familias y empresas con el dinero que todos les hemos regalado antes de que acabe esta historia con la gente a mordiscos por las esquinas. Me fascina, me ha fascinado siempre, la capacidad de los socialistas para exprimir hasta el vómito la imagen, la figuración, la fachada, los pajaritos pío-pío y los gatitos miau-miau . Son, de lejos, los mejores en la puesta en escena, en la farsa del teatro de la política, en el permanente engaño masivo. Después de la reunión, los del Gobierno, aleccionados por toda la tropa de gurús del marketing y del thanking-thinking ése de los cojones, se hacen los enfadados con los banqueros, el se nos está acabando la paciencia ; lo que quiere oír el pueblo. Palabras reproducidas hasta la saciedad por los medios que les escriben al dictado. Palabras que, como todas, se las lleva el viento. Pero hay otra manera. Es menos populista, menos eficaz, da menos votos y todo eso, pero es infalible. Se llama legislar y no hay viento que pueda con ellas. Si hemos entregado graciosamente tropecientosmil millones de euros a los que nos han metido en este fregado para no acabar apuñalándonos , tampoco costaría tanto obligar por ley a que ese dinero sea destinado a familias y empresas para activar la economía, y quien no cumpla con la legislación vigente, que se atenga al Código Penal. Es muy sencillo y leyes más infumables se han perpetrado por estos lares. Pero, me temo, nos quedaremos con la foto, las declaraciones, los graznidos para el circo romano. Seguiremos instalados en la farsa de una política en la que ya no cree nadie.

jueves, 29 de enero de 2009

Lisbeth Salander

Cuando algún criminal de esos que abundan en el mundo de la cultura trató de llevar a las pantallas argentinas el inabarcable mundo imaginativo de Mafalda , una niña argentina, que era niña pero no gilipollas, salió sollozando de la sala de cine. Ella lo explicó muy claro. Le habían engañado, le habían traicionado, le habían apuñalado por la espalda. Aquella niña que salió en la pantalla explicó, entre lágrimas e indignación, que no era Mafalda por algo tan sencillo de que aquello que salía de su boca no era su voz. Inapelable. La fuerza de la lectura se reparte entre autor y lector, por eso es la modalidad más descomunal del mundo de la creación. A las dotes del narrador se unen las imaginativas del lector, que recreamos en nuestro imaginario aquello que nos resulta más atractivo. No sé si han llevado a la pantalla la vida de Miguel Strogoff , espero que no, pero no iría a verla ni encañonado por el benemérito cuerpo. Fue el primer libro que leí entero (es importante eso de leer algo entero), pero nadie me va a contar a mí, por muchas horas de jolibud que tenga, el gesto del rostro del correo del zar cuando le estaban aplicando un hierro incandescente en los ojos por negarse a traicionar a su madre. Nadie tiene derecho a traicionar esos gestos, esas voces, ese imaginario personal. Mario Conde fue el otro día al trullo y explicó a los presos que lo mejor que sacó de sus años de cárcel fueron los 300 libros que se había leído. Animó a los presos a hacer lo mismo "porque cambiaréis este mundo". No tengo duda alguna sobre los presos, Mario, pero nos vendría mejor que contaras esa batalla en las Escuelas de Negocios, a ver si cambia algo el cuento. Cuento toda esta brasa para que a nadie se le ocurra prostituir a través de la pantalla a Lisbeth Salander, la investigadora punky de la trilogía Millennium de Stieg Larsson, esa mujer que odia a los hombres que no aman a las mujeres. Un descubrimiento de novela negra de la buena. Que los que donde pone cultura leen dinero no nos jodan la imaginación.

jueves, 22 de enero de 2009

El tío Pete

A Pete no se la pega un negro. Un negro siempre será un negro, aunque ahora les llamen afroamericanos. Pete lo sabe bien, los conoce, tan bien como a los blancos, aunque dentro de poco quizá esté mal visto llamar blancos a los blancos y empiecen a llamarles caucásicos o escandinavos o bretones, lo que mejor quede. Pete no es como muchos europeos, que como no conviven con los negros aseguran que ellos no son racistas o sienten que, lo que es un síntoma cuando no de racismo sí de superioridad mal entendida, un negro es mejor por el simple hecho de serlo, como si Idi Amín no fuese negro. O Bokassa. Pete hace décadas que superó esa clase de escenarios y por tanto que Obama sea presidente lo único que le reporta es alegría, por los negros actuales y los pasados, pero nada más. Por eso cuando Pete Seeger se subió al escenario para cantar en la toma de posesión, aunque no lo dijera, Obama sabía qué le estaba diciendo: vale, chaval, me alegro de que estés ahí, pero recuerda que no hicimos la guerra únicamente porque estuviéramos convencidos de que un negro es un igual que un blanco. La lucha por los derechos civiles sólo era una parte, importante, pero una parte. Sé que algunos verán mi inclusión en este concierto como una dejación de mis posiciones políticas con respecto al capitalismo atroz o a las multinacionales o al medio ambiente, pero tú sabes que no es así. Y por eso estoy aquí, para recordártelo, porque ya tengo 89 años, pero sigo siendo igual de peligroso que cuando me condenaron a un año de prisión en 1950 o cuando a mi grupo, Los Weavers, les prohibieron sonar en cualquier emisora durante 18 meses. Hicimos la guerra -aunque fuera musical- contra aquellos y no dudes ni por un instante que la haremos contra vosotros si os convertís en lo mismo contra lo que decíais que vais a luchar. Tal vez Bruce, que acaba de llegar a esto, se conforme con tres o cuatro gestos. De Bono mejor no hablo, lo acabo de ver subido a un carro, de heno. Pero yo no me conformaré. Y, si yo no puedo, sabes que vendrán otros detrás. Nos vas a tener en tu cogote. Suerte.

jueves, 15 de enero de 2009

Los 'probes' pilotos

En una de sus inmejorables viñetas, Forges caricaturizaba hace algunos años a los pilotos que se habían puesto en huelga. Perfectamente engominados, trajeados impecablemente, altos, guapos, con guantes y todo, marchaban en manifa detrás de una pancarta que decía Pilotos en lucha. Por la mejora salarial. La pancarta la llevaban sus mayordomos. Ya se sabe, una imagen vale más que mil palabras y el humorista madrileño explicó como nadie lo que pensaba la peña ante la huelga de unos sujetos que ganan en media mañana lo que le cuesta a un mileurista todo un mes currando de sol a sol. Y es lo que tiene vivir en Plutón, que debe ser el domicilio fijo de pilotos, controladores y sindicalistas del Sepla, ese sindicato de clase (de clase alta pero de clase), que no te enteras de lo que pasa en la puta rue porque ni al que asó la manteca se le ocurre montar esta movida con la que está cayendo. En un país en donde la semana pasada nos desayunábamos con el parado tres millones (P3M que dirían los de la izquierda abertzale, que siguen siendo unos fenómenos con el tema de los nombres) es una absoluta obscenidad que estos señores planteen lo que plantean y tengan 24 horas durmiendo en aeropuertos a trabajadores que vuelven de sus vacaciones navideñas, estudiantes que, rascando de sus bolsillos, han decidido gastarse todo lo que tienen y viajar antes de que ya no se pueda o inmigrantes que regresan a su tierra después de hacerles el pan, llevarles la leche o limpiarles la mierda a los señores pilotos. Obsceno e indigno. "Es que hemos pasado unas pruebas muy duras", suelen decir los jetas en cuestión, como los notarios, que también han pasado por pruebas muy duras. No lo niego que habrían pasado, los notarios digo, pero lo cierto es que después de las pruebas básicamente se han dedicado a tocarse los cojones a tres manos. "D. Basilio Lakort certifica que se llama D. Basilio Lakort. 300 euros, pase usted por caja. Gracias". Con un par. Debería haber una ley que prohíba los matrimonios pilota-notario, notaria-pilota, piloto-piloto etecé. Para repartir la riqueza.

jueves, 8 de enero de 2009

La vergonzante foto del niño palestino

Supongo que se habrán hartado en estos días de otro año viejo y caduco (no hay nada más viejo y caduco que lo de siempre; la barbarie) de ver las imágenes de los cadáveres de peligrosos presuntos terroristas palestinos del futuro, que no levantan un palmo del suelo. Pero de entre todas las imágenes, hay una especialmente sobrecogedora y que, de haber justicia internacional, debería sentar en un Tribunal a algún militar israelí. La imagen, publicada por El País el día de Reyes, no daba lugar a equívocos. Aparecía el cadáver de un niño que no llegaría a los cinco años con el cuerpo intacto, no pudo morir bajo los escombros ni despedazado por ningún tanque hebreo porque estaba impoluto, pero con dos balazos en el pecho que delataban el brutal asesinato al que había sido sometido el peligrosísimo terrorista venidero. Se lo tuvieron que pulir a muy poca distancia de dos tiros traperos . Así de claro. La ministra de Defensa israelí, de cuyo nombre no quiero acordarme porque no merece la pena ni ir a Google a buscarlo, asegura que es conocido que los de Hamás (otra pandilla de bárbaros) se parapetan en la población civil. ¿Dónde habremos oído nosotros esos argumentos antes? Mire, Sra. ministra, con todo mi respeto para el pueblo judío, lo que usted dirige no es un Ejército, es una cuadrilla de matones que no están llevando a cabo ni una guerra ni una invasión, sino una matanza. Hasta en las guerras hay leyes. Pero cuando lo que más le preocupa a ese indigno gobierno del que forma parte es que ningún soldado judío vuelva en ataúd a Jerusalén o Tel Aviv pasa lo que pasa; que no importa lo más mínimo volar maternidades si eso da garantías para que ningún oficial resulte herido con un esguince de muñeca. En una guerra, Sra. ministra, se combate al enemigo militar, aunque sea sufrido y cueste bajas. Pero ya nadie esperamos nada de un pueblo que, habiendo sufrido en sus propias carnes una de las mayores atrocidades de la historia de la Humanidad, ha decidido aplicar similares medicinas.